El mantenimiento adecuado de un vehículo es esencial para garantizar su seguridad y funcionamiento óptimo.  Con el tiempo y el uso, estas piezas se desgastan y es necesario reemplazarlas. Una de las preguntas más comunes que los conductores tienen es: ¿Cuál es el precio por cambiarlas? En este artículo, desglosaremos todo lo que necesitas saber sobre las pastillas de freno, sus tipos y el precio asociado a su reemplazo. 

¿Qué son? 

Son componentes esenciales del sistema de frenado de un vehículo y forman parte de la seguridad activa de éste. Su función principal es crear la fricción necesaria para detener el vehículo cuando el conductor pisa el pedal del freno. Están ubicadas dentro de las pinzas de freno y presionan contra los discos de freno (o rotores) para reducir la velocidad del coche y eventualmente detenerlo. 

Están diseñadas para soportar altas temperaturas y fricción intensa, pero como cualquier otro componente del vehículo, se desgastan con el tiempo. Es crucial revisarlas y cambiarlas periódicamente para garantizar que el sistema de frenos funcione de manera efectiva. 

Tipos 

Existen varios tipos en el mercado, cada uno con sus propias características y ventajas. Los principales tipos incluyen: 

Orgánicas

Fabricadas con una mezcla de fibras y resinas, las orgánicas son conocidas por ser silenciosas y producir menos polvo que otros tipos. Sin embargo, tienden a desgastarse más rápidamente y no son tan efectivas en condiciones de alta temperatura, como en la conducción deportiva. 

Semimetálicas

Estas contienen un porcentaje de materiales metálicos, lo que les permite ofrecer un rendimiento superior en términos de durabilidad y capacidad de frenado. Son más ruidosas que las pastillas orgánicas y pueden producir más polvo, pero son una opción popular para la mayoría de los vehículos debido a su equilibrio entre rendimiento y costo. 

Cerámicas

Están hechas de compuestos cerámicos y fibras sintéticas. Son conocidas por su excelente rendimiento, durabilidad y menor producción de polvo. Además, son más silenciosas que las pastillas semimetálicas. Sin embargo, suelen ser más caras y pueden no ser ideales para todas las condiciones de conducción, especialmente en vehículos de alto rendimiento que generan mucho calor. 

De carbono 

Estas pastillas están diseñadas para soportar condiciones extremas y son utilizadas principalmente en vehículos de alto rendimiento y deportivos. Ofrecen un rendimiento excepcional en términos de frenado y durabilidad, pero también son las más caras del mercado. 

¿Cuánto cuesta cambiar las pastillas de freno? 

El precio por cambiarlas puede variar significativamente dependiendo de varios factores, incluyendo el tipo de pastillas que elijas, la marca de tu vehículo y el lugar donde realices el servicio. A continuación, te ofrecemos un desglose general de los costos asociados al reemplazo de las pastillas de freno: 

El precio medio de las pastillas de freno dependerá en gran medida del tipo de pastilla de freno utilizada, pero puede variar de entre 20€ y 300€ por juego.  A esto habría que sumarle la mano de obra por cada eje, por lo que en total reemplazar las pastillas de freno puede oscilar entre los 300€ y 600€ aproximadamente. 

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¿Cada cuánto cambiarlas?

No existe una regla fija para determinar cuándo se deben cambiar, ya que varios factores influyen en su vida útil. En promedio, deben ser reemplazadas entre los 30,000 y 70,000 kilómetros. Sin embargo, esta cifra puede variar considerablemente dependiendo del tipo de conducción y las condiciones a las que se somete el coche. 

Además de los kilómetros recorridos, es crucial estar atento a ciertas señales que indican que necesitan ser reemplazadas. Si escuchas un chirrido agudo al frenar, puede ser una señal de que las pastillas están desgastadas. También, si notas que la distancia de frenado ha aumentado o el pedal del freno se siente más blando de lo habitual, es posible que este componente esté llegando al final de su vida útil. 

Algunos coches modernos están equipados con sensores de desgaste de las pastillas de freno que activan una luz de advertencia en el tablero cuando es necesario cambiarlas. Sin embargo, no todos los vehículos tienen este sistema, por lo que es importante realizar inspecciones visuales regulares.